19 de julio 2021

Leila Guerriero brindó una clase magistral para más de 130 personas de la Patagonia. Cómo reportear y qué escribir; qué priorizar y cómo sistematizar el trabajo, fueron temas centrales de la charla. Organizadas por la Fundación de Periodismo Patagónico, se vienen las clases magistrales de Cristian Alarcón y de Jorge Carrión.

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Los y las asistentes a la clase magistral que brindó Leila Guerriero coincidieron en su devolución, después de finalizado el encuentro: se potenciaron las ganas de leer y el deseo de escribir mejor. Es decir, de lograr “textos musculosos”, según la propia definición de Leila.

Más de 130 personas de las diversas provincias de la región, participaron este jueves 15 de julio de la clase magistral que la periodista y editora Leila Guerriero dio para la Fundación de Periodismo Patagónico (FPP). Este evento gratuito contribuyó al debate para repensar la profesión. Leila dijo que un periodista narrativo es aquel que “no está mirando lo que está en el centro: ahí se ubica la noticia, lo que importa en el día a día, lo que se aborda con mirada urgente y suele desaparecer rápido para pasar al olvido”. Entonces, el o la cronista que sale a contar historias de la periferia lo hace no porque las “considera marginales”, sino porque logra después de un tiempo rescatar esa centralidad que otros/as descartaron.

Los textos de no ficción pueden decir qué, cómo, cuándo sucedieron las cosas, pero lo que en verdad deben intentar desentrañar es el por qué, “no como respuesta total sino como aproximación concreta a lo real”, explicó Leila.

Durante una hora y media, la autora de “Los suicidas del fin del mundo” -su primer libro que tanto marcó a los patagónicos/as como a todos los que hacen periodismo narrativo- habló de este género que trabaja con la materia prima de lo real, que le da muchísimo valor a la escritura y que en ese sentido toma los recursos de la ficción, aunque jamás sus procedimientos.

Hizo referencia a los dos textos más fuertes que contempla la no ficción: por un lado las crónicas -que Juan Villoro definió como ese “ornitorrinco de la prosa”-, donde la historia que se cuenta está poblada de voces, pero el único protagonista es el caso; y por otro el perfil, que sí pone el foco en la figura de la persona que se quiere presentar y contar.

Durante la clase, Leila Guerriero reveló algunas claves para construir “textos musculosos” y mostró su universo de trabajo, acercando ejemplos, decisiones que tomó, análisis de textos propios. Dijo que el primer paso que debe dar el periodista es “salir a la intemperie”. Mencionó en ese sentido la importancia de “la permanencia, la persistencia y la paciencia” como único camino para hacer no ficción.

Habló de la necesidad de llegar a los temas munidos de información y luego “lanzarnos al reporteo profundo, sabiendo qué es lo que queremos contar”. Insistió en que una buena crónica como un buen perfil, para no ser sólo una entrada de Wikipedia, deben sostenerse en dos historias: la evidente, la superficial; y la otra, la más secreta, la que subyace, la que vuelve esa historia universal. Después de todo eso, dijo, lo que queda es escribir: lograr a través del lenguaje tocar al lector, conseguir traducir la realidad a un material “exquisitamente escrito”. Recomendó “concentrarse en un arranque” que, para ser efectivo, debe ser necesario -“preguntémonos, ¿es necesario este arranque?”, recomendó-, y pensar en un final que esté a la altura, “que no dictamine nada ni sea una fábula de Esopo”.

Luego de una hora de charla, el encuentro se centró en las preguntas de los y las asistentes, lo que permitió un diálogo directo entre la gran maestra de la crónica latinoamericana y los y las cronistas de la región.

Otras dos clases magistrales gratuitas se realizarán durante 2021, en el marco de “Yerta”, el programa de capacitación de la Fundación de Periodismo Patagónico. Durante el mes de septiembre el encuentro estará a cargo de Cristian Alarcón, y en diciembre la brindará Jorge Carrión desde España.